Según Sondeo SommerGroup®
Desocupación prolongada genera ansiedad y baja autoestima
Quienes están desocupados laboralmente por mucho tiempo tienen algunos inconvenientes a la hora de reincorporarse a la vida laboral, como la falta de actividad reciente (desconexión del mundo empresarial) y la falta de motivación derivada de esta situación. A continuación, SommerGroup® quiso sondear los principales efectos de una desocupación prolongada en los ejecutivos.
Las cifras muestran un 48% de apoyo para la alternativa “Ansiedad y bajo autoestima”. Es difícil manejarse en una situación en que la persona está conciente de su vulnerabilidad laboral y de que el paso del tiempo sólo agrava su inestabilidad. Por eso, los niveles de ansiedad se van incrementando y en paralelo, el no poder hacer frente a esta crítica realidad, afecta directamente a la autoestima. “Esta baja valoración puede jugar en contra en un proceso de selección y en el impacto que provoque en las entrevistas. Es importante prepararse, hacer una revisión de la trayectoria laboral, de modo de poder identificar cuáles han sido los logros y tratar de entrenarse para mostrar una actitud segura y definida, expresando lo mejor de uno”, comenta Ximena rodríguez, Socia/Gerente de Clientes de SommerGroup®.
En esta línea, es aconsejable pedir ayuda profesional, que le permita al ejecutivo orientarse, apoyarse y entrenarse para mantenerse vigente. “Hay que mirar la historia personal, revisar en forma crítica qué elementos faltan para capacitarse y no quedar atrás”, agrega.
La segunda opción más votada, con un 40%, fue “Dificultades en las finanzas personales”. No podemos obviar que una situación larga de desempleo supone un gran problema a nivel económico y que esto nos limita en muchos terrenos. “Es fundamental contar con la flexibilidad para adaptarse a los tiempos críticos y reinventarse, ya sea haciendo asesorías o emprendiendo, y haciendo el ejercicio de abrirse a otras alternativas laborales, con condiciones más realistas”, indica la ejecutiva.
Sin duda, es uno de los principales efectos de la desocupación prolongada, ya que la persona puede apretarse el cinturón en algunos ítems pero hay otros que son irrenunciables y que mantendrá el mismo nivel de gastos fijos. Es importante vivir permanentemente con ciertos ahorros, que permitan sobrellevar futuros escenarios inesperados.
Finalmente, la tercera alternativa “Desmotivación y pasividad”, contó con un 12% de los votos. Puede resultar complicado luchar contra el desánimo, pero debemos tratar de planificar nuestro regreso al empleo como si fuera un trabajo en sí mismo. “Rendirse no es una opción, por lo que es importante que afrontemos la situación desde una perspectiva psicológica realista y acciones concretas que nos ayuden a avanzar. Buscar trabajo es un trabajo, por lo tanto hay que dedicarle tiempo sistemático y permanente, planificar un horario para la búsqueda de empleo, dejando espacio para tratar de hacer cosas que generen felicidad y desafíen”, agrega Rodríguez.
En conclusión, es relevante empezar por realizar un análisis objetivo de nuestra situación y de nuestro perfil. Luego, estudiar nuestro entorno para buscar oportunidades reales, con apertura a la adaptación y establecer una rutina y tiempo sistemático para buscar trabajo de forma activa.
Datos de la muestra
N 107
Fecha Mayo/Junio 2014